VIOLACION SEXUAL EN EL MATRIMONIO.
En nuestra siguiente Parashat, estaremos meditando sobre el tópico que lleva por título Violación Sexual Dentro del Matrimonio. Las leyes están de cabeza en todos los países comenzando que ahora los delincuentes y criminales tienen derechos humanos y los familiares de las personas muertas y asesinadas por estos, no los tienen, de la misma forma ahora existe la Violación Sexual dentro del Matrimonio, es decir que si la esposa no tiene deseos por el esposo y el la busca y comienza a tener relaciones sexuales con su esposa, con su mujer y hembra, la esposa, la policia y la corte lo considera cómo una violación sexual.
No queremos ofender a nuestras hermanas creyentes y pastoras al meditar sobre este importante tema, pero es muy necesario, estamos hablando de matrimonios evangèlicos con formación doctrinal sobre este tema porque las esposas se niegan a tener relaciones sexuales con su esposo sin argumentar motivos por muchos meses a pesar que el esposo la llama al lecho conyugal, las esposas no ignoran que por este motivo muchos hogares se han visto destruidos por el adulterio bien en ella o en el. Las Santas Escrituras son tajantes, precisas y reveladoras sobre el respecto.
Y si por algún motivo el esposo la toma a su mujer por decir a la fuerza, pues se íria a la cárcel por mucho tiempo, desde luego que no somos machistas sino que enfatizamos, predicamos y enseñamos lo que El Corazón de Dios nos habló y habla por medio de su Santa Palabra.
PALABRAS DE ORACION.
PALABRAS DE ORACION.
DESARROLLO.
Gn: 2.24. Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.
Cuando Jehová Dios de los Ejèrcitos, la presento a Eva a Adán y los unió en matrimonio en el Jardín del Edèn, en el paraíso, les dijo textualmente que ambos tanto el así como ella tendrían que dejar a sus padres y que se uniria a su esposa, a su mujer y hembra y llegarian a ser una sola carne, (Los esposos y las mujeres, las esposas y los hombres llegan a ser una sola carne en el lecho conyugal y esto se fundamenta mucho más cuando ella queda embarazada, eso significaba que todo matrimonio, que todo varón, que todo esposo y mujer podrían disfrutar de intimidad sexual y que está relación estaría unida por un fuerte vínculo fisico, emocional y sentimental las Santas Escrituras describen así el placer que el matrimonio concede al esposo. Los administradores de justicia algún día estaran delante del Rey de Reyes y Señor de Señores y tendrán que responder por haber cambiado el buen sentido de la relaciones sexuales en el matrimonio y por haber quitado poder conyugal a los esposos y dar el poder denegarse al esposo en el lecho conyugal, de la misma forma toda mujer creyente o inconversa que se negara a su esposo y marido en la intimidad tendrá que responder por ello al Señor y si esto es por caúsa de adulterio de ella o para caída del esposo.
Prov: 5.18,19.Que sus propios pechos te embriaguen a todo tiempo. Con su amor estés en un éxtasis constantemente
El día en que Adán y Eva fueron creados, en El Corazón de Jehová Dios de los Ejèrcitos, tambièn nosotros fuimos creados y en Eva fueron creadas todas las mujeres, todas las esposas y hembras, no existe nada sució en que el esposo y su mujer tengan relaciones sexuales sin mancilla, sin embargo nuestras mujeres están mancillando la relaciones sexuales delante de nuestro Dios y esto no le es agradable a El. No existe nada de malo en que los esposos besemos, mordamos y acariciemos los pechos de nuestras hembras porque esto es agradable a nosotros tanto a ellas como a todo esposo, nuestro amado Dios desea que nuestras relaciones sexuales sean hasta que podamos tener las energias para ello y no estar buscando mujeres en la calle o en los prostibulos.
I Co: 7.3,5 El hombre debe cumplir su deber conyugal con su esposa, e igualmente la mujer con su esposo.
El Santo de Israel, está hablando a la iglesia de Corinto y por intermedio de ella a todos los esposos de las siete iglesias apostólicas y a las iglesia de nuestros día y nos dice: El varón, èl esposo, èl marido debe de cumplir teniendo relaciones conyugales, intimas, sexuales y carnales con su esposa, con su mujer, con su hembra en la intimidad del lecho conyugal, no le debe de abandonarla, de dejarla sola sin entrar en cuerpo de su mujer, porque esto es altamente peligroso para ella, porque se sentiria ofendida, abandonada, rechazada y molesta. Y de la misma forma cómo el esposo y marido cumple el deber conyugal de tener relaciones sexuales, intimas con su mujer, ella debe de cumplir el deber conyugal porque es una necesidad en la vida del varón, del esposo por tanto ella, la esposa debe de entregarse en los brazos y caricias del esposo y no negarse a ello bajo ninguna excusa de cansancio, de fatiga, de enfermedad cuando solo es una mera excusa para escapar de cumplir con èl esposo en el lecho conyugal, porque es altamente peligroso que lo haga porque podria orillar a que el esposo, el marido cometiera adulterio buscando otra mujer, fuera a un prostibulo o que se auto complaciera marturbándose, con lo cual èl cayese en pecado y de la Gracia de Dios.
El Santo de Israel, está hablando a la iglesia de Corinto y por intermedio de ella a todos los esposos de las siete iglesias apostólicas y a las iglesia de nuestros día y nos dice: El varón, èl esposo, èl marido debe de cumplir teniendo relaciones conyugales, intimas, sexuales y carnales con su esposa, con su mujer, con su hembra en la intimidad del lecho conyugal, no le debe de abandonarla, de dejarla sola sin entrar en cuerpo de su mujer, porque esto es altamente peligroso para ella, porque se sentiria ofendida, abandonada, rechazada y molesta. Y de la misma forma cómo el esposo y marido cumple el deber conyugal de tener relaciones sexuales, intimas con su mujer, ella debe de cumplir el deber conyugal porque es una necesidad en la vida del varón, del esposo por tanto ella, la esposa debe de entregarse en los brazos y caricias del esposo y no negarse a ello bajo ninguna excusa de cansancio, de fatiga, de enfermedad cuando solo es una mera excusa para escapar de cumplir con èl esposo en el lecho conyugal, porque es altamente peligroso que lo haga porque podria orillar a que el esposo, el marido cometiera adulterio buscando otra mujer, fuera a un prostibulo o que se auto complaciera marturbándose, con lo cual èl cayese en pecado y de la Gracia de Dios.
4) La mujer ya no tiene derecho sobre su propio cuerpo, sino su esposo. Tampoco el hombre tiene derecho sobre su propio cuerpo, sino su esposa.
Las Santas Escrituras, no declaran que la esposa, la mujer, la hembra que está casada no tiene derecho sobre su cuerpo, sobre su sexualidad, sobre su intimidad, sobre su carne y sexo para negarse para tener relaciones intimas, sexuales con su esposo, con su marido y varón bajo ningún armumento, excusa o mentira y de la misma forma èl esposo, èl marido, èl varón no tiene derecho sobre su propio cuerpo, sobre su carne y sexualidad sino su esposa, su mujer para buscarlo cuando ella quiera y lo desee. Ambos están libres de poder buscarse en la intimidad, en el lecho para luego dedicarse a la oración y a buscar de Dios.
Las Santas Escrituras, no declaran que la esposa, la mujer, la hembra que está casada no tiene derecho sobre su cuerpo, sobre su sexualidad, sobre su intimidad, sobre su carne y sexo para negarse para tener relaciones intimas, sexuales con su esposo, con su marido y varón bajo ningún armumento, excusa o mentira y de la misma forma èl esposo, èl marido, èl varón no tiene derecho sobre su propio cuerpo, sobre su carne y sexualidad sino su esposa, su mujer para buscarlo cuando ella quiera y lo desee. Ambos están libres de poder buscarse en la intimidad, en el lecho para luego dedicarse a la oración y a buscar de Dios.
5) No se nieguen el uno al otro, a no ser de común acuerdo, y sólo por un tiempo, para dedicarse a la oración. No tarden en volver a unirse nuevamente; de lo contrario, pueden caer en tentación de Satanás, por falta de dominio propio.
Cómo es de vuestro conocimiento Santos amados del Señor Jesucristo, èl apóstol Pablo escribió dos cartas a la Iglesia de los Corintios, pues algo grave o muy grave estaba aconteciendo en el seno de la iglesia, y una vez más El Santo Espíritu de Dios, les comienza a hablar y por intermedio de ella a nosotros porque los mismos pecados que había en corinto existe en nuestras iglesias y nos dice: Los esposos, tanto el varón, el esposo, el marido y la mujer, la esposa, la hembra no se deben de negar uno al otro para estar en la intimidad del lecho conyugal bajo ninguna excusa o mentira sino de lo contrario tomarse en una sola carne, èl esposa debe de explorar la intimidad de su mujer cómo en el primer día, tanto la esposa y el marido deben de fundirse en una sola carne dando gracias Al Creador por por estos maravillosos momentos de placer sexual, intimo que tienen los conyugès, que tenemos los esposos, no deben de separarse salvo por motivos de entregarse a la oración y al ayuno pero luego de buscar de Jehová Dios de los Ejèrcitos, volveos a uniros en una sola carne, en la intimidad sexual porque de los contrario podrían ser tentados por vuestra falta de dominio propio y caer en pecado.
Cómo es de vuestro conocimiento Santos amados del Señor Jesucristo, èl apóstol Pablo escribió dos cartas a la Iglesia de los Corintios, pues algo grave o muy grave estaba aconteciendo en el seno de la iglesia, y una vez más El Santo Espíritu de Dios, les comienza a hablar y por intermedio de ella a nosotros porque los mismos pecados que había en corinto existe en nuestras iglesias y nos dice: Los esposos, tanto el varón, el esposo, el marido y la mujer, la esposa, la hembra no se deben de negar uno al otro para estar en la intimidad del lecho conyugal bajo ninguna excusa o mentira sino de lo contrario tomarse en una sola carne, èl esposa debe de explorar la intimidad de su mujer cómo en el primer día, tanto la esposa y el marido deben de fundirse en una sola carne dando gracias Al Creador por por estos maravillosos momentos de placer sexual, intimo que tienen los conyugès, que tenemos los esposos, no deben de separarse salvo por motivos de entregarse a la oración y al ayuno pero luego de buscar de Jehová Dios de los Ejèrcitos, volveos a uniros en una sola carne, en la intimidad sexual porque de los contrario podrían ser tentados por vuestra falta de dominio propio y caer en pecado.
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