DEVORA LIDER Y GUERRERA .
INTRODUCCION.
DEVORA LIDER Y JEFE MILITAR.
Dèvora, está en la cumbre, en la cima del monte Tabor junto al comandante Barac y su gran ejèrcito de 10,000 hombres es un lugar estratègico de la vista de la llanura Esdrelón o Jezreel, Dèvora pudo ver a los lejos el brillo plateado de las miles de espadas y de los 900 carros de guerra equipados, preparados y armados con afiladas cuchillas de hierro que le salían de los ejes de los carros de guerra, este ejèrcito era mucho más grande, feroz, brutal y sanguinario estaba al mando, bajo la dirección bèlica del cruel, perverso y sanguinario Sísara, comandante del ejèrcito Moabita, èl cual había quitado la paz, la tranquilidad, el gozo y la felicidad de los habitantes, de los pobladores de Neftalí y Zabulón. Pero estos eran nuevos tiempos, tiempos de libertad, de victoria, de ganancia y de gran bendición.
DESARROLLO.
DEVORA EXHORTA Y LLAMA LA ATENCION A BARAC.
Jueces:4.6,7, Y ella envió a llamar a Barac hijo de Abinoam, de Cedes de Neftalí, y le dijo: ¿No te ha mandado Jehová Dios de Israel, diciendo: Ve junta a tu gente en el monte de Tabor, y toma contigo diez mil hombres de la tribu de Neftalí y Zabulón,
* Ante los continuos ataques, agresiones, robos y humillaciones de los cananeos hacia el pueblo de Israel, ellos comenzaron a clamar a Jehová Dios de los Ejèrcito y El Santo de Israel les respondió y levanto a Barac para que los libertara, pero al parecer este varón era un hombre inseguro he indeterminado a escuchar y seguir las ordenes del Alto Y Sublime Dios de Israel y no hacia nada de nada por lo cual Dèvora lo hizo llamar, como juez que era ella y le dijo: (Barac era hijo de Abinoam de Cedes de Nefatalí ciudad de refugio ubicada a 16 Km al oeste de Merom, era el hogar de Barac quien reunió a sus ejèrcitos en esa ciudad, fue llamada Cedes-Qedesh en Josue:12.22. Cedes de Neftalí en Jueces:4.6. Cedes en Galilea en Josue:20.7. Fue tomada cautiva y su población deportada por Tiglath Pileser II Reyes15.29.) Barac, Jehová Dios de los Ejèrcitos, te ha llamado para que tu libertes al pueblo de la mano dura de Sísara, no te ha dicho anda y prepara un ejèrcito de diez mil hombres que puedan pelear con espada de las tribus de Neftalí y Zabulón y reunelos en el monte Tabor y Yo te entregare a tus enemigos y a Sísara en tus manos.
BARAC UN VARON INSEGURO Y TEMEROSO.
8) Barac le respondió: Si tu fueras conmigo, yo irè; pero si no fueres conmigo no irè.
* Ante las palabras de Dèvora, Barac-Barak-Baraq le respondió: Dèvora si tu fueras conmigo, si tu en el momento de la lucha, de la guerra, del encuentro, de la batalla contra nuestros enemigos los cananeo, estás a mi lado, yo irè y peleare y triunfaremos pero si tu en este momento no me prestas de tu ayuda, de tu fuerza y de tu presencia, no irè.
Muchas veces nosotros al igual que Barac, tambièn hemos desertado del campo de batalla, del campo de guerra porque no tenemos la ayuda, la fuerza, el conocimiento y la presencia de nuestros hermanos pastores olvidando que en todo momento contamos con el Poder, la Fuerza y la Santa Presencia de nuestro Señor Jesucristo y Su Santo Espíritu, Sísara es el tipo del Diablo que ya está derrotado, perdido y condenado por la eternidad-Olam
DEVORA PROFETIZA LA MUERTE DE SISARA.
9) Ella dijo: Irè contigo; más no será tuya la gloria de la jornada que emprendes, porque en mano de mujer venderá Jehová a Sísara. Y levantándose Dèvora, fue con Barac a Cedes.
* Dèvora-Dabar, respondió a Barac-sera como tu dices estarè contigo en el campo de batalla, frente al enemigo, mi espada será tu espada y tu espada será mi espada, la víctoria será mi victoria y la gloría será mi gloria, el triunfo del día de guerra que emprendamos en el campo de guerra será mía, tus enemigos no huirán de ti Barac sino del filo de mi espada, porque en mano, en fuerza de mujer, de varona y de hembra Jehová Dios de los Ejèrcitos, entregara, dará, avergonzara y venderá a Sísara, al enemigo del pueblo de Israel-Yisrael y ponièndose de pie, levantándose Dèvora, fue con Barac a Cedes, a la ciudad de Neftalí, la cual había sido la ciudad real cananea.
DEVORA LIDER Y GUERRERA MILITAR.
10) Y junto a Barac a Zabulón y a Neftalí en Cedes, y subió con diez mil hombres a su mando; y Dèvora subió con èl.
Dèvora, mujer valiente, aguerrida, esforzada, guerrera y de fe junto y reunió al comandante Barac y a todos los varones de las ciudades de Zabulón y de Neftalí en Cedes ciudad de refugio, subió con el ejèrcito de diez mil hombres, de diez mil soldados bajo sus ordenes, bajo su mando, varones valientes y aguerridos que no temían pelear con el enemigo ni con las tropas, con los ejèrcitos de Sísara comandante del rey Yabin De Jasor de Canaán.
13) Y reunió Sísara todos sus carros, novecientos carros herrados, con todo el pueblo que con èl estaba, desde Haroset Goin hasta el arrollo de Cisón.
Sísara, al enterarse de los preparativos del comandante Barac, que estaba haciendo para atacarlo, hizo reunir los 900 carros de guerra con cabezas metalicas afiladas en cada rueda, ademas de ello lo acompañaba todo el pueblo desde Haroset Goin ( Era un pueblo al norte de Palestina donde quedaba el hogar de Sísara, comandante del ejèrcito del rey Jabin, Jue4.2. 4.13. 4.16. La palabra o frase con todo el pueblo que estaba con èl parece significar que varias comunidades etnicas vivián allí y que todos ellos apoyaron a Sísara en la guerra y ataque a Israel.) hasta el arrollo de Cisón ( Arroyo que corre en las tierras occidentales del valle de Jezreel, nace en los monte de Gilboa y Tabor, y desemboca en el mediterráneo, gran parte de su recorrido es un lecho seco que se llena totalmente con las lluvias torrenciales de la època a la altura de Meguido, sin embargo toma aguas más permanentes. Allí tuvo lugar la batalla donde Dèvora y Barac derrotaron a Sísara).)
LEVANTATE BARAC Y VE EL DIA QUE JEHOVA HA ENTREGADO A TUS ENEMIGOS.
14) Entonces Dèvora dijo a Barac: Levántate, porque este es el día en que Jehová ha entregado a Sísara en tus manos. ¿No ha salido Jehová delante de ti? Barac descendió del monte de Tabor, y diez mil hombres en pos de èl.
Fue entonces que Dèvora, dijo a Barac: Vamos Barac, ponte sobre tus pies, porque este es el día en que nuestro Buen Dios Jehová de los Ejèrcitos, El Dios de Israel ha entregado, ha puesto, ha vendido y avergonzado a Sísara en tus manos. ¿Acaso Jehová Dios, no ha salido delante de ti y de tu ejèrcito de diez mil valientes? ¡Que no tienen temor ni miedo el derrotar al enemigo! ¿Acaso tienes dudas de ellos? Al escuchar estás palabras profèticas de aliento, de gozo y de victoria Barac se puso de pie y comenzó a descender del monte Tabor y diez mil varones le seguían y junto a èl tambièn bajaba, marchaba y galopaba la generala de nombre Dèvora rumbo a la victoria y al triunfo.,
JEHOVA DIOS DE LOS EJERCITOS DA LA VICTORIA A DEVORA Y BARAC.
15) Y Jehová quebrantó a Sísara, a todos sus carros y a todo su ejèrcito, a filo de espada delante de Barac; y Sísara descendió del carro, y huyo a pie.
En aquel día, nuestro amado Dios Jehová de los Ejèrcito y El Angel de Jehová, destruyó, quebrantó, hizo polvo a todos los carros de guerra y a todo el gran ejèrcito del comandante Sísara, a filo de espada para Gloria y Alabanza de Su Santo Nombre, delante de Barac comandante temeroso, inseguro, sin personalidad, miedoso y cobardón y Sísara al ver a su ejèrcito derrotado por las huestes del Rey de Reyes y Señor de Señores, se tiró, se apartó, se bajó del carro de guerra que lo llevaba y comenzó a huir a pie, corriendo desesperado, asustado, temeroso, muy cansado y buscando refugio porque se le iba, se le escapaba la vida.
17) Y Sísara huyó a pie a la tienda de Jael mujer de Heber el ceneo; porque había paz entre Jabin rey de Hazor y la casa de Heber ceneo.
18) Y saliendo Jael a recibir a Sísara, le dijo: Ven señor mío, ven a mi, no te tengas temor. Y èl vino a ella a la tienda, y ella le cubrió con una manta.
Sísara conocía muy bien en el lugar donde estaba y quien era su enemigo y que de el no podría escapar, huir y desaparecer por lo tanto èl pensó en su corazón-Lev, si logro llegar hasta el asentamiento, hasta el campamento y a la tienda de Heber èl Ceneo, me librare y escapare con bien, porque entre èl rey Jabin y Heber había èxistia un tratado, un acuerdo y una decisión de paz-Shalom.
Jael esposa de Heber, sabía de la guerra, de la batalla entre los ejèrcitos de Sísara y Barac, por lo cual Jael salió a recibir a la puerta de su casa a Sísara y le dijo: Ven comandante Sísara, ven señor mío, ven a mí (La palabra ven señor mío, que Jael le hablo y le dijo a Sísara era la forma como ella estaba ganando la confianza de Sísara) no tengas temor, miedo o angustia de tu sierva, de está mujer que te va ha servir con su vida, ante las palabras de Jael, Sísara perdió toda desconfianza y tuvo seguridad; luego pues èl vino a la tienda y le hizo recostar en su lecho, en su cama para que descansara y recuperara fuerzas y le cubrió con una manta, con una frazada.
19) Y èl le dijo: te ruego me des de beber un poco de agua, pues tengo sed. Y ella abrió un odre de leche y le dio de beber, y le volvió a cubrir.
Sísara, no pensó morir en ese día pero la muerte ya estaba echada sobre èl y tenía que cumplirse, Sísara le dijo a Jael: Te ruego por favor que me traigas agua para poder bebèr y refrescar está sed que me está agobiando, Jael rápidamente abrio un odre que contenía leche fresca y le dio a bebèr, a tomar de la leche y le volvió a cubrir, a tapar con la manta para que se durmiera.
20) Y èl le dijo: Estate a la puerta de la tienda; y si alguien viniere, y te preguntare. diciendo: ¿Hay aquí alguno? tú responderás que no.
Sísara, le volvió a hablar y le dijo: Estate a la puerta, parate en la entrada de tu tienda y si ocurriera que alguien viniera y te preguntare diciendo: ¿Jael está en tu tienda escondido Sisara el comandante del rey Jabin? tu le responderás rápidamente. ¡No, no hay nadie! en mi tienda.
21) Pero Jael mujer de Heber tomó una estaca de la tienda, y poniendo un mazo en su mano, se le acercó calladamente y le metió la estaca por la sienes, y la enclavó en la tierra, pues èl estaba cargado de sueño y cansado; y así murió.
Pero Jael, la esposa de Heber ya tenía sus planes y era hacer pagar a Sísara por los años de robo, de pobreza, de brutalidad, de sangre y de muerte que Sísara había sembrado en el pueblo de Israel, pues ella tomó, agarró entre sus manos una estaca con la cual aseguraba la tienda y tomando un mazo en su mano, sè acercó en silencio, calladamente para no despertarlo y le clavo la estaca por la sienes y quedó clavada en la tierra, en el piso, pues èl, estaba profundamente dormido a causa de la guerra, del caminar bajo el sol y del cansancio.
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