LA CORRIDA DE TOROS.
En nuestra siguiente Parashat, estaremos meditando sobre el tema que lleva por titulo. La Corrida de Toros. En España y en casi todos los países ibericos, existe la vergonzosa, cruel, malvada y despiadada costumbre de las Corridas de Toros, heredada de España, está actividad sè practica para divertir a los fanaticos, a los despiadados, enfermizos y perversos espectadores, los cuales están llenos de deseos de ver correr sangre derramada y el cuerpo lleno de banderillas, de sufrimiento, de dolor, de agonía, de muerte y para terminar el hèroe de está campaña, de está matanza cruel, abominable, desequilibrada, perversa le clava su espada y ante tal golpe el noble toro cae muerto y este torero, este miserable, cruel y enfermizo hombre es homenajeado por los espectadores.
Cuando nosotras las personas nos clavamos una aguja, un alfiler o clavo nos lamentamos de dolor, imaginemos solo por un solo instante el dolor que sentiria el pobre toro de lidia, cuando todo el tiempo en que es atormentado por el torero que dice que es cristiano, le va clavando las banderillas con tremendos clavos afilados en su cuerpo, luego es toreado por el torero, por este hijo de Satanás, para que luego de todo este gran suplicio, hombres a caballo lo lanceán y le claven lanzas afiladas en su cuerpo y desde todas las tribunas cuando el torero llega a matar al animal, le lanzan obsequios, gritos y exclamaciones de felicitación, desde este altar llamamos miserables a todo hombre que se dedica ha torear y a terminar con la vida de dichos animales.
DESARROLLO
Isaias:66.3. El que mata a un toro es como quien mata a un ser humano. El que sacrifica un cordero es como quien le rompe el cuello a un perro. El que ofrece una ofrenda de cereal es como quien ofrece la sangre de un cerdo. El que quema incienso de ofrenda es como quien bendice a un ídolo. Han elegido sus propios caminos y les gustan sus practicas asquerosas.
Jehová Dios de los Ejèrcitos, en el día de la Creación dio vida a las bestias, a las fieras y toda clase de animales y entre ellos tambièn creó al Toro de Lidia que es tambièn conocido como toro bravo, el cual fue el toro salvaje del pasado grande, fuerte con grandes cuernos dirigidos hacía adelante un bello y fuerte animal preparado, creado para el trabajo del campo, una maquina incansable que podría soportar el fuerte trabajo del campo, este animal fue creado para ayudar al hombre en el preparado de la tierra, para jalar la carga y tambièn para la alimentación del hombre no en forma indiscriminada, sin embargo nosotros los hombres, las personas cultas, instruidas, capacitadas con profesiones, titulos y doctorados que decimos que somos creyentes cristianos somos una partida de criminales y brutales asesinos que llenamos con nuestras vidas las plazas de toros de España y países Sudamericanos, otros que se enriquecen con la crianza de estos ejemplares llamados Toros de Lidia; según nuestros pensamientos que no son como los Pensamiento de Dios y sus Caminos que no son son como nuestros caminos, nosotros pensamos que eso es bueno, que es para nuestra diversión, que no existe ningún mal en ello, pero todos estaremos en algún momento delante de su Santa Presencia y que podremos responder de nuestros crímenes y asesinatos.
El Santo Dios Jehová de los Ejèrcitos, Dios de Israel y de todo el universo nos dice: La persona, èl hombre que mata, que sacrifica, que maltrata a un toro con violencia, con saña, con crueldad, con salvajismo para su placer, para su deleite, para su fama y enriquecimiento es como si estuviere matando a un hombre, a una persona, a un semejante, como quien mata a un semejante a traición y está ocupando el lugar de Dios para quitar la vida a un animal llamado toro de lidia solo, herido, sediento, asustado, temeroso y lleno de dolor.
El hombre, èl torero que mata, que asesina, que ejecuta, que inmola, que elimina, que extermina y que aniquila, a un toro bravo, a un toro de lidia con crueldad, con salvajismo, con dolor del pobre animal, para su gloría, para su fama, para enriquecerse es como un Sicario que mata y asesina a un semejante por dinero, porque la voz de Dios dice. Que es como si matara a un hombre.
Desde este lugar sentimos mucho dolor, tristeza he impotencia por la Corrida de Toros y la terrible muerte de estos animales, no así por la muerte de los toreros, pues ellos se lo buscaron y derramaron de sangre de estos animales todo coliseo y plaza de toros.
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