JUDAS EL ISCARIOTE.

INTRODUCCIÓN.

En nuestra siguiente Parashat, estaremos meditando sobre el tema que lleva por título. Judas Iscariote, discípulo que traicionó y vendió al Señor Jesús en manos de los hijos de las tinieblas. El nombre Judas Yehúdad Iscariote-Isqerayyot-H-Ioudas-G Judas significa alabanza, un nombre propio que se encuentra frecuentemente tanto en el Antiguo como en el N. T. Incluso entre los Doce había dos discípulos  que llevaban este nombre, y por esta razón está habitualmente asociado con el sobrenombre Iscariote, Isacar  lugar de su nacimiento, de Isacar, del cual proviene su apelativo o apellido, que es una ciudad  de Judea.

Las Santas Escrituras testifican y declaran  respecto a la historia de Judas Iscariote más allá de los hechos desnudos de su llamado al Apostolado, su traición, y su muerte. Su lugar de nacimiento, como hemos visto, se indica en su nombre Iscariote, y puede señalarse que su origen le separa de los demás Apóstoles, que eran todos galileos, pues se presume que Judas era de la ciudad Judea, se ha sugerido que este hecho puede haber tenido alguna influencia en su carrera, al provocar falta de simpatía con sus hermanos en el Apostolado. No se nos dice nada respecto a las circunstancias de su llamado o su participación en el ministerio de los doce y es significativo que nunca se le menciona sin alguna referencia a su gran traición. Así en la lista de los Apóstoles dada en los Evangelios Sinópticos: 
DESARROLLO.
Mt:10.2,4. Y Judas Iscariote.

JUDAS LLAMADO AL MINISTERIO.
* Las Santas Escrituras nos declaran que Judas fue el último en ser llamado al ministerio de los doce, posiblemente esto haya pasado porque los otros once eran pescadores galileos, nativos de allí y judas era de la ciudad de Isacar de Judea, las Santas Escrituras no nos dan mucha luz o información sobre su llamado, solo declara que Judas hijo de Simón, fue contado entre los doce. Al parecer Judas era instruido por lo cual le dieron el cargo de tesorero de los doce, del Señor o del Reino, entonces podríamos decir que Judas Iscariote tuvo el Ministerio de las Finanzas, de la economia y del dinero.

JUDAS  EL TESORERO DE LOS DOCE.

Dice: Judas Iscariote, uno de sus discípulos, el que le había de entregar: ‘¿Por qué no se ha vendido este perfume por trescientos denarios y se ha dado a los pobres?’ No decía esto porque le preocuparán los pobres, sino porque era ladrón, y como tenía la bolsa, se llevaba lo que echaban en ella.

Judas Iscariote, uno de los doce, amador de las cosas mundanales, la debilidad de Judas no eran las mujeres, las hembras, la lujuria o algún placer carnal, sino que especialmente era el dinero y los puestos privilegiados, como por ejemplo el de llevar la economia del ministerio del Señor Jesús, pues el llevaba la bolsa del dinero donde las siervas del Señor colocaban, ponían y sembraban sus ofrendas y promesas al Señor Jesús, de las cuales Judas robaba, sacaba, quitaba para sí mismo, sin saber que Él Señor Jesús conocía sus latrocinios y rateriás. 

LA TRAICIÓN DE JUDAS.

Mt:26.14,16. Entonces uno de los Doce, llamado Judas Iscariote, fue donde los sumos sacerdotes, y les dijo: ¿Qué me queréis dar, y yo os lo entregaré?  

* Entonces, Judas Iscariote, uno de los Doce, se fue donde los sumos sacerdotes para entregárselo, se fue donde los sacerdotes con la intención, con la finalidad de hacer negocio con la Vida y la Persona del Mesias-Mashiaj y dijo yo puedo poner en sus manos a mi Maestro, yo se los puedo entregar, al oírlo ellos, se alegraron por esta oportunidad y ocasión que les era dada por Judas y cuando él preguntó cuánto dinero me podrías dar, ellos respondieron y prometieron darle dinero, en la cantidad de 30 piezas de plata, cosa que agrado a Judas. Judas era un hombre, un varón sin principios, vocación, integridad, ministerio ni vida espiritual sino lleno de los frutos carnales, como muchos de nosotros, este varón era ambicioso, traidor, ladrón, desleal y falto, tardo, de poca oración y comunión con Dios Padre y las Santas Escrituras nos declaran que él  tomó la iniciativa, no es tentado o seducido por los sacerdotes, sino que se acerca a ellos por su propia decisión, por su propia cuenta. Lucas,  dice la misma narrativa, pero añade otro matiz al atribuir el hecho a la instigación de Satanás: 
EL DIABLO ENTRA EN LA VIDA DE JUDAS ISCARIOTE.

Lc:22.3. Entonces Satanás entró en Judas, llamado Iscariote, que era del número de los Doce; y fue a tratar con los sumos sacerdotes y los jefes de la guardia del modo de entregárselo. 

* A Judas, le había venido la tentación, el pensamiento de hacerse de dinero fácil, pero solo era una tentación algo tal vez muy distante de ocurrir, pero sin embargo Satanás que no duerme entro en sus pensamientos, en sus deseos, en sus emociones, necesidades y sentimientos y no lo dejaba dormir, ni estar en paz es muy probable y muy posible que luchara contra estos dardos ardientes del abismo y sucumbió y busco a los sacerdotes para arreglar el precio de la entrega, de la infamia  y de la traición. San Juan hace hincapié en la instigación del espíritu maligno: “cuando ya el diablo había engañado  a Judas Iscariote, el hijo de Simón, el propósito de entregarle. El mismo Evangelista, como hemos visto, nos da una temprana insinuación del previo conocimiento de Cristo de la traición y en el mismo capítulo dice expresamente: “Porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían y quién era el que le iba a entregar. Pero coincide con los Evangèlios Sinópticos al registrar una predicción más explícita de la traición en la Última Cena: Cuando dijo estas palabras, Jesús se turbó en su interior y declaró: Yo os aseguro que uno de vosotros me entregará Juan 13, 21. Y cuando el propio San Juan, a petición de Pedro, preguntó quién era éste, “ le responde Jesús: Es aquel a quien dé el bocado que voy a mojar. Y, mojando el bocado, lo toma y se lo da a Judas, hijo de Simón Iscariote. Y entonces, tras el bocado, entró en él Satanás. Jesús le dice: Lo que vas a hacer, hazlo pronto. Pero ninguno de los discípulos entendió por qué se lo decía. Como Judas tenía la bolsa, algunos pensaban que Jesús quería decirle: Compra lo que nos hace falta para la fiesta, o que le mandaba dar algo a los pobres 13, 26,29. Estos últimos detalles sobre las palabras de Jesús y la natural conjetura de los discípulos.

LA SEÑAL DEL BESO PARA LOS SACERDOTES.

Lc:22.47,48. Mientras el aun hablaba, se presentó una turba; y el que se llamaba Judas, uno de los doce, iba al frente de ellos; y se acercó hasta Jesús para besarle. Entonces Jesús le dijo: Judas ¿con un beso entregas al hijo del Hombre?. 
* Él Señor Jesús estaba hablando con sus discípulos sobre las cosas que iban a acontecer, El ya había terminado de orar a solas porque sus amados discípulos no habían podido orar junto a El, cuando de repente se presentó una turba de gente de mala calaña junto con los sacerdotes y Judas iba delante de ellos, porque la señal era al que yo bese ese es el Mesias y vosotros lo podrás prender y encarcelar, Judas sin mediar palabras se acercó hasta donde estaba él Señor Jesús, y le dio un beso en la mejilla, a lo cual Él Señor Jesús le dijo. Judas con un beso entregas, te deshaces y traicionas a tu Señor, a tu Maestro, al  Galardón de Israel,  a la Roca Viva, a tu Dios y Salvador.
Mt: Y arrojando las piezas de plata en el templo, salió, y fue y se ahorcó.
SUICIDIO DE JUDAS ISCARIOTE.
* Judas de Isacar del sur de Judah, cuando vio preso, golpeado, lacerado, humillado por los sacerdotes, por él sumo sacerdote, por él gobernador Poncio Pilatos y su soldadesca, cuando vio como lo maltrataron y vejaron, acusado por su conciencia corrió ante los sacerdotes y les dijo a gritos  Sangre Inocente, la Vida del Hijo del Hombre, el Cuerpo del Santo de Israel he vendido por plata, por treinta monedas de plata, yo me arrepiento de haberlo hecho, he pecado contra Dios, esa Vida no os pertenece, porque es de Dios, dejadlo en libertad, os ruego que lo pongáis en libertad; ante el pedido, ante los alegatos, ante la solicitud de Judas la cual fue negada por los sacerdotes; a Judas Iscariote. Con estas palabras. Y a nosotros que nos importa, ese es tu problema, allá tú, ante esta respuesta tan fría, cruel, despiadada y inhumana le entró una depresión profunda, pues él ya no podía estar con los otros discípulos, ni con la madre del Señor, ni con las mujeres que servían al Señor y ante estos sentimientos y emociones encontradas en su corazón y en su mente, tomó la  mala decisión de matarse, de quitarse la vida, de suicidarse y para ello optó por ahorcarse y quitarse la vida.