EL ESPIRITU DE HERODES ESTA ACTIVO.
INTRODUCCION.
En nuestra siguiente Parashat estaremos meditando sobre el tema que lleva por título. Está Activo el Espíritu de Herodes, hemos meditado sobre este tema con anterioridad, pero en este día esperamos ampliarlo para una mayor comprensión, estamos en pleno siglo XXI y la criminalidad en contra de los bebès y niños ha aumentado en una forma alarmante, perversa y escalofriante, eso sin precisar los millones de bebès que on asesinados por sus propias madre, padres y doctores en las clinicas de la muerte y el Aborto.
Muchos pastores han escrito sobre èste tema y delinean el sentido de su sermón hacía la iglesia y enseñan que èl espíritu de Herodes está atacando a la iglesia del Señor y nosotros enfatizamos què esto no es así, porque estos espíritus inmundos, estos ángeles caídos atacan a los niños, niñas y bebès de padres mundanos y paganos.
Cómo dice el título de nuestro tema. El espíritu de Herodes está activo, si está activo en las diferentes culturas y sociedades paganas y mundanas porque escuchamos o leemos que. Madre mató a sus tres o cuatro hijos envenenandolos por diferentes circunstancias o que èl padre o èl conviviente de la madre mató, asesino a los hijos de la mujer y podriamos continuar con ejemplos.
PALABRAS DE ORACION.
DESARROLLO
Mateo:2.1,19.
EL NACIMIENTO DEL SEÑOR JESUS.
1) Y cómo fue nacido Jesús en Bethlehem de Judea en días del rey Herodes, he aquí unos magos vinieron de oriente a Jerusalèn,
Por la Unica y Santa Voluntad de Dios Jehová de los Ejèrcitos, nacio El Señor Jesús en la pequeña ciudad de Belèn de Judá y esto aconteció en los días en que reinaba el despreciable y perverso rey Herodes el Grande y he aquí unos reyes de oriente vinieron hacía èl para inquirir sobre el nacimiento del niño Jesús en Jerusalèn, para adorarle. ( Los nombres de estos tres reyes aparecen escritos y grabados por primera vez, en un evagèlio apócrifo encontrado en el siglo V, en el texto dice que los tres magos eran hermanos. Melchor de Persia, Gaspar de de la India y Baltasar de Arabia.)
2) Diciendo: ¿Dondè está El Rey de los Judíos, que ha nacido? porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle.
Cuando entraron y se presentaron ante el rey Herodes, los hicieron con gozo, con alegría y mucho jubilo y preguntaron ¿Nos pueden decir donde está El Rey de los judíos, què ha nacido? ¡Sabemos que El Niño ha nacido, porque su estrella hemos visto en el oriente! ¡Y nosotros hemos venido para adorarle, conocerle y bendecir su Nombre!
3) Y oyendo esto èl rey herodes, se turbó, y toda Jerusalèn con èl.
El rey Herodes, recibió a los tres reyes supuestamente magos y cuando ellos preguntaron por el lugar del nacimiento del niño Rey, del Señor Jesús su corazón se turbó, se trastorno, se aceleró, se azoro, se alteró, se preocupo y perturbó por el temor, por el miedo y el pánico de perder su trono y reinado y cuando el pueblo se entero por intermedio de los allegados al rey tambièn se turbó y tuvo esperanza por primera vez.
4) Y convocados todos los príncipes de los sacerdotes, y los escribas del pueblo, les preguntó dondè había de nacer El Cristo.
De inmediato hizo convocar y reunir a los príncipes de los sacerdotes, a los escribas del pueblo y a sus ministros y les preguntó si sabían donde deberia de nacer El Cristo.
5) Y ellos le dijeron: En Bethlehem de Judea; porque así está escrito por el profeta:
Todo los príncipes de los sacerdotes, los escribas y sus ministros le contestaron casi al unísono, en forma unanime en la ciudad de Belèn de Judea, porque así está escrito por Jehová Dios de los Ejèrcitos y por su profeta.
7) Entonces Herodes llamando en secreto a los magos, escucho de ellos diligentemente el tiempo del aparecimiento de la estrella;
Al tener conocimiento exacto del nacimiento del Señor Jesús, del Rey de los judíos Herodes, hizo llamar en secreto a los tres reyes magos y comenzó a hacerles preguntas sobre la aparición de la estrella y en la forma cómo los había guiado hasta Jerusalèn. 8) Y enviandolos a Bethlehem, dijo: Andad allá, y preguntad con diligencia por el niño; y despuès que le hallareis, hacèdmelo saber, para que yo tambièn vaya y le adore.
Y les dijo: Andad pues a la ciudad de Belèn y preguntad, informaos diligentemente por el nacimiento del Niño y cuando le encotrèis venid y hacèdmelo saber para que yo tambièn vaya le adore y lleve presentes para El.
9) Y ellos, habiendo oído al rey, se fueron: Y he aquí que la estrella que habían visto en el oriente, iba delante de ellos, hasta que llegando, se puso donde estaba el niño.
Y vista la estrella, se regocijaron con muy grande gozo.
Los tres reyes magos, los cuales no practicaban la magia, ni la adivinación, ni la hechiceria, ni brujeria, ni la lecturación de las cartas, todo lo contrario ellos eran AstroFísicos con gran conocimiento en el estudio de las estrellas y del cosmos. Se despidieron del rey Herodes luego de haber escuchado los requerimientos del rey. Y he aquí que la gran estrella que habían visto desde el oriente la cúal los iba guiando en cada momento de su caminar a los reyes, hasta que llegando a la ciudad de Bèlen de Judea se posó, se puso en dirección de la casa donde había nacido y estaba El Niño Jesús. Y cuando ellos levantarón sus ojos al cielo vieron a la estrella, comenzaron a exaltar, a glorificar y bendecir El Nombre de Dios con mucho gozo y alegría de corazón.
11) Y entrando en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose le adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron dones, oro, è incienso y mirra.
Los tres reyes comenzaron a entrar en la casa glorificando El Nombre de Dios y vieron al Niño Jesús, en los brazos de su madre maría y los tres reyes se postraron, se pusieron de rodillas delante de El y le adoraron, le exaltaron, le glorificaron y uno a uno comenzaron a abrir sus tesoros y sacando de ellos sus obsequios le pusieron a sus pies del Santo y Salvador de Israel y de todo el universo oro, incienso y mirra. El Señor Jesús era y es por siempre El Rey de Reyes y esto se cumplía en estos reyes que eran sus súbditos y reyes. 12) Y siendo avisados por revelación en sueños que no volvieran a Herodes, se volvieron a su tierra por otro camino.
No podriamos saber o establecer que tiempo se quedaron los reyes, en Bèlen, pero fueron avisados por revelación en sueños mientras dormían que no regresaran, que no volvieran a Jerusalèn llevandole la información requerida, pedida por Herodes, ellos se volvieron a su tierra por otro camino.
13) Y partidos ellos, he aquí el ángel de Jehová aparece en sueños a Josè, diciendo: Levántate y toma al niño y a su madre, y huye a Egipto, y estáte allá hasta que yo te lo diga; porque ha de acontecer, porque Herodes buscará al niño para matarlo.
Inmediatamente despuès que los reyes partieron de Bèlen, he aquí El Angel de Jehová, El Espíritu Santo de Dios, se le apareció en sueños a Josè diciendole, advirtiendolè y alertandolè què èl rey Herodes iba a buscar al Niño Jesús para matarlo, para asesinarlo por lo tanto era apremiante, sumamente urgente y necesario què tomara al niño y a su madre y huyera, escapara a Egipto y se quedara allí sin salir de la ciudad hasta que Dios mismo le avisara y dijera que era seguro què regresara a Bèlen.
14) Y él despertando, tomó al niño y á su madre de noche, y se fué á Egipto
Y despertando aún cuando era de noche, preparandolo todo tomó al Niño Jesús, y a su madre y comenzaron a viajar a Egipto.
16) Herodes entonces, como se vió burlado de los magos, se enojó mucho, y envió, y mató á todos los niños que había en Bethlehem y en todos sus términos, de edad de dos años abajo, conforme al tiempo que había entendido de los magos.
Ya habían pasado varios días y los tres reyes magos no habían regresado donde Herodes, para darle la información requerida, por lo cúal, èl se sintió, se vio burlado, ofendido, traicionado, engañado, estafado, escarnecido y zaherido y se enojo mucho, se encendió en colèra y en ira extrema a tal grado de querer matar o de hacer matar y llamó a sus ministros, a sus siervos para que mataran en Jerusalèn y en las ciudades del contorno a todo niño recièn nacido hasta los dos años, conforme a la información dada inocentemente por los tres reyes a Herodes.
Los soldados comenzaron a buscar, a registrar casa por casa y sacaban a los niños varones y los mataban, los asesinaban muchas veces en los brazos de sus madres, fue aquel día de derramamiento de sangre y muerte de los niños inocentes.
Ese mismo espíritu inmundo, los cúales son muchos y no solo uno está atacando a los niños de ambos sexos en nuestros días, es tiempo de pararnos en la brecha y orar por la niñez, por sus padres tanto por la madre y èl padre para que El Señor los cubra y los proteja èste gran mal.
Muchos pastores han escrito sobre èste tema y delinean el sentido de su sermón hacía la iglesia y enseñan que èl espíritu de Herodes está atacando a la iglesia del Señor y nosotros enfatizamos què esto no es así, porque estos espíritus inmundos, estos ángeles caídos atacan a los niños, niñas y bebès de padres mundanos y paganos.
Cómo dice el título de nuestro tema. El espíritu de Herodes está activo, si está activo en las diferentes culturas y sociedades paganas y mundanas porque escuchamos o leemos que. Madre mató a sus tres o cuatro hijos envenenandolos por diferentes circunstancias o que èl padre o èl conviviente de la madre mató, asesino a los hijos de la mujer y podriamos continuar con ejemplos.
PALABRAS DE ORACION.
DESARROLLO
Mateo:2.1,19.
EL NACIMIENTO DEL SEÑOR JESUS.
1) Y cómo fue nacido Jesús en Bethlehem de Judea en días del rey Herodes, he aquí unos magos vinieron de oriente a Jerusalèn,
Por la Unica y Santa Voluntad de Dios Jehová de los Ejèrcitos, nacio El Señor Jesús en la pequeña ciudad de Belèn de Judá y esto aconteció en los días en que reinaba el despreciable y perverso rey Herodes el Grande y he aquí unos reyes de oriente vinieron hacía èl para inquirir sobre el nacimiento del niño Jesús en Jerusalèn, para adorarle. ( Los nombres de estos tres reyes aparecen escritos y grabados por primera vez, en un evagèlio apócrifo encontrado en el siglo V, en el texto dice que los tres magos eran hermanos. Melchor de Persia, Gaspar de de la India y Baltasar de Arabia.)
2) Diciendo: ¿Dondè está El Rey de los Judíos, que ha nacido? porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle.
Cuando entraron y se presentaron ante el rey Herodes, los hicieron con gozo, con alegría y mucho jubilo y preguntaron ¿Nos pueden decir donde está El Rey de los judíos, què ha nacido? ¡Sabemos que El Niño ha nacido, porque su estrella hemos visto en el oriente! ¡Y nosotros hemos venido para adorarle, conocerle y bendecir su Nombre!
3) Y oyendo esto èl rey herodes, se turbó, y toda Jerusalèn con èl.
El rey Herodes, recibió a los tres reyes supuestamente magos y cuando ellos preguntaron por el lugar del nacimiento del niño Rey, del Señor Jesús su corazón se turbó, se trastorno, se aceleró, se azoro, se alteró, se preocupo y perturbó por el temor, por el miedo y el pánico de perder su trono y reinado y cuando el pueblo se entero por intermedio de los allegados al rey tambièn se turbó y tuvo esperanza por primera vez.
4) Y convocados todos los príncipes de los sacerdotes, y los escribas del pueblo, les preguntó dondè había de nacer El Cristo.
De inmediato hizo convocar y reunir a los príncipes de los sacerdotes, a los escribas del pueblo y a sus ministros y les preguntó si sabían donde deberia de nacer El Cristo.
5) Y ellos le dijeron: En Bethlehem de Judea; porque así está escrito por el profeta:
Todo los príncipes de los sacerdotes, los escribas y sus ministros le contestaron casi al unísono, en forma unanime en la ciudad de Belèn de Judea, porque así está escrito por Jehová Dios de los Ejèrcitos y por su profeta.
7) Entonces Herodes llamando en secreto a los magos, escucho de ellos diligentemente el tiempo del aparecimiento de la estrella;
Al tener conocimiento exacto del nacimiento del Señor Jesús, del Rey de los judíos Herodes, hizo llamar en secreto a los tres reyes magos y comenzó a hacerles preguntas sobre la aparición de la estrella y en la forma cómo los había guiado hasta Jerusalèn. 8) Y enviandolos a Bethlehem, dijo: Andad allá, y preguntad con diligencia por el niño; y despuès que le hallareis, hacèdmelo saber, para que yo tambièn vaya y le adore.
Y les dijo: Andad pues a la ciudad de Belèn y preguntad, informaos diligentemente por el nacimiento del Niño y cuando le encotrèis venid y hacèdmelo saber para que yo tambièn vaya le adore y lleve presentes para El.
9) Y ellos, habiendo oído al rey, se fueron: Y he aquí que la estrella que habían visto en el oriente, iba delante de ellos, hasta que llegando, se puso donde estaba el niño.
Y vista la estrella, se regocijaron con muy grande gozo.
Los tres reyes magos, los cuales no practicaban la magia, ni la adivinación, ni la hechiceria, ni brujeria, ni la lecturación de las cartas, todo lo contrario ellos eran AstroFísicos con gran conocimiento en el estudio de las estrellas y del cosmos. Se despidieron del rey Herodes luego de haber escuchado los requerimientos del rey. Y he aquí que la gran estrella que habían visto desde el oriente la cúal los iba guiando en cada momento de su caminar a los reyes, hasta que llegando a la ciudad de Bèlen de Judea se posó, se puso en dirección de la casa donde había nacido y estaba El Niño Jesús. Y cuando ellos levantarón sus ojos al cielo vieron a la estrella, comenzaron a exaltar, a glorificar y bendecir El Nombre de Dios con mucho gozo y alegría de corazón.
11) Y entrando en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose le adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron dones, oro, è incienso y mirra.
Los tres reyes comenzaron a entrar en la casa glorificando El Nombre de Dios y vieron al Niño Jesús, en los brazos de su madre maría y los tres reyes se postraron, se pusieron de rodillas delante de El y le adoraron, le exaltaron, le glorificaron y uno a uno comenzaron a abrir sus tesoros y sacando de ellos sus obsequios le pusieron a sus pies del Santo y Salvador de Israel y de todo el universo oro, incienso y mirra. El Señor Jesús era y es por siempre El Rey de Reyes y esto se cumplía en estos reyes que eran sus súbditos y reyes. 12) Y siendo avisados por revelación en sueños que no volvieran a Herodes, se volvieron a su tierra por otro camino.
No podriamos saber o establecer que tiempo se quedaron los reyes, en Bèlen, pero fueron avisados por revelación en sueños mientras dormían que no regresaran, que no volvieran a Jerusalèn llevandole la información requerida, pedida por Herodes, ellos se volvieron a su tierra por otro camino.
13) Y partidos ellos, he aquí el ángel de Jehová aparece en sueños a Josè, diciendo: Levántate y toma al niño y a su madre, y huye a Egipto, y estáte allá hasta que yo te lo diga; porque ha de acontecer, porque Herodes buscará al niño para matarlo.
Inmediatamente despuès que los reyes partieron de Bèlen, he aquí El Angel de Jehová, El Espíritu Santo de Dios, se le apareció en sueños a Josè diciendole, advirtiendolè y alertandolè què èl rey Herodes iba a buscar al Niño Jesús para matarlo, para asesinarlo por lo tanto era apremiante, sumamente urgente y necesario què tomara al niño y a su madre y huyera, escapara a Egipto y se quedara allí sin salir de la ciudad hasta que Dios mismo le avisara y dijera que era seguro què regresara a Bèlen.
14) Y él despertando, tomó al niño y á su madre de noche, y se fué á Egipto
Y despertando aún cuando era de noche, preparandolo todo tomó al Niño Jesús, y a su madre y comenzaron a viajar a Egipto.
16) Herodes entonces, como se vió burlado de los magos, se enojó mucho, y envió, y mató á todos los niños que había en Bethlehem y en todos sus términos, de edad de dos años abajo, conforme al tiempo que había entendido de los magos.
Ya habían pasado varios días y los tres reyes magos no habían regresado donde Herodes, para darle la información requerida, por lo cúal, èl se sintió, se vio burlado, ofendido, traicionado, engañado, estafado, escarnecido y zaherido y se enojo mucho, se encendió en colèra y en ira extrema a tal grado de querer matar o de hacer matar y llamó a sus ministros, a sus siervos para que mataran en Jerusalèn y en las ciudades del contorno a todo niño recièn nacido hasta los dos años, conforme a la información dada inocentemente por los tres reyes a Herodes.
Los soldados comenzaron a buscar, a registrar casa por casa y sacaban a los niños varones y los mataban, los asesinaban muchas veces en los brazos de sus madres, fue aquel día de derramamiento de sangre y muerte de los niños inocentes.
Ese mismo espíritu inmundo, los cúales son muchos y no solo uno está atacando a los niños de ambos sexos en nuestros días, es tiempo de pararnos en la brecha y orar por la niñez, por sus padres tanto por la madre y èl padre para que El Señor los cubra y los proteja èste gran mal.
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